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El Circularity Roadmap de Roca Group propone reducir hasta en un 90% el impacto de su actividad sobre recursos naturales escasos mediante la aplicación de medidas concretas
Tras un profundo ejercicio de análisis sobre sus materiales y procesos, Roca Group ha lanzado un exhaustivo plan de acción destinado a afrontar los retos de la economía circular. Con el objetivo de minimizar el impacto medioambiental de sus operaciones bajo criterios de durabilidad, reparabilidad o reciclabilidad, el Circularity Roadmap establece las pautas para el diseño de producto, selección y uso de materiales, fabricación, distribución y disposición de los productos al final de su vida útil.
El documento reúne una serie de propuestas que se suman a las buenas prácticas que ya se están implementando en la organización, como el reaprovechamiento del 70% de los residuos generados o la eliminación de polietileno y poliestireno del interior de los embalajes con el objetivo de reducir en un 90% la utilización de plásticos de un solo uso.
Para la elaboración del Circularity Roadmap se estudiaron los productos y embalajes más representativos de diez categorías y se concluyó que la aplicación de medidas específicas en el 30% de las familias y en el 10% de las referencias de embalaje podría reducir hasta un 90% el impacto sobre minerales y recursos fósiles escasos.
Cinco áreas estratégicas
El Circularity Roadmap agrupa sus propuestas en cinco áreas estratégicas: Ecodiseño, Materiales, Embalaje, Residuos y Fin de la vida útil. Un enfoque integral que tiene en cuenta todas las etapas por las que pasa un producto desde que es concebido, fabricado e instalado hasta que al final de su vida útil se recupera, recicla o desensambla para procesar sus componentes.
En el ecodiseño de nuevos productos se está comenzando a aplicar el concepto Cradle to Cradle, que promueve el uso de materiales reciclables o biodegradables y que no generen residuos.
Roca Group prioriza el uso de materiales de origen reciclado y certificado sin renunciar a la calidad y durabilidad de sus productos. En este sentido se persigue ampliar los porcentajes actuales de contenidos reciclados en los principales materiales como el acero (20%), el latón (30%), el aglomerado (74%) o el cartón (65%).
La gestión de embalajes es otro punto relevante en el que se engloban medidas como la reducción de plásticos de un solo uso, la reutilización de palés con clientes o el reaprovechamiento de residuos plásticos de fábrica para la producción de film retráctil en un proceso totalmente circular.
En cuanto al aprovechamiento de residuos, Roca Group estudia y monitoriza iniciativas piloto emprendidas en algunas de sus plantas para escalar las más exitosas a nivel global. En Austria, por ejemplo, su planta de producción se propone alcanzar una tasa de reciclado del 98% y en Alemania se cuenta con un sistema propio para la recuperación y reutilización de plásticos en la producción de sistemas de instalación.
Finalmente, en lo que atañe a la vida útil del producto, el Circularity Roadmap propone un plan de medidas que incluye fomentar la distribución de recambios y las reparaciones más comunes, así como promover la recuperación de productos desinstalados para su correcto desensamblado y reciclado.
Análisis de Ciclo de Vida y Declaraciones Ambientales de Producto
Para monitorizar el impacto de las distintas iniciativas contempladas en el Circularity Roadmap y poder cuantificar su alcance y efecto, se trabaja en base a la metodología de Análisis de Ciclo de Vida (ACV), evaluando los impactos ambientales del producto durante todas las etapas de su existencia: extracción, procesado, producción, distribución, uso y fin de vida. Los resultados de estos estudios se publican en las Declaraciones Ambientales de Producto, unos documentos normalizados y verificados en los que se divulga la información sobre el desempeño ambiental de cada producto o material.
Concebido como una herramienta de trabajo y a partir de un análisis completo del ciclo de vida de los productos, el Circularity Roadmap constituye un valioso instrumento para asegurar procesos más sostenibles y eficientes con metas precisas y plazos de cumplimiento concretos.